
Ficha informativa del ratón: artistas de la observación ágiles
«¡Mira qué rápida es!»
Las ratones son diminutas, pero encierran todo un mundo de movimiento, curiosidad y espíritu de equipo. Quien las observa, descubre pequeños acróbatas veloces como el rayo que están constantemente en movimiento: escarban, trepan, olisquean y corretean. Los niños se dan cuenta rápidamente de que las ratones no son peluches, sino fascinantes compañeras de observación: ágiles, inteligentes y llenas de vida.
Datos esenciales de un vistazo
- Tamaño: 7–11 cm (más la cola)
- Peso: 20–40 g
- Edad: 1,5–2 años
- Carácter: activo, curioso, social
- Particularidad: siempre viven en grupo, ¡nunca tenerlas solas!
Comportamiento & Comunicación
Las ratones son pequeñas jugadoras de equipo con grandes sentidos. Se «comunican» entre sí mediante sutiles sonidos, marcas de olor y movimientos. En el grupo, se ayudan mutuamente a acicalarse y construir el nido, un gran ejemplo de colaboración.
Los niños pueden observar fácilmente cómo se relacionan los animales entre sí. Una ratona agudiza el oído cuando otra se acerca, o se escabulle rápidamente al siguiente túnel; todo eso forma parte de su lenguaje.
💬 Consejo de observación para familias:
Cuenten cuántas veces cambian de lugar sus ratones en un minuto. ¡Se sorprenderán de la cantidad de movimiento que hay en cuerpos tan pequeños!

La vida cotidiana con ratones
Las ratones necesitan espacio y variedad. Un recinto alto con varios niveles, ramas para trepar, tubos y un lecho suave en el que puedan excavar las hace felices. Prefieren vivir en un grupo pequeño y armonioso, por ejemplo, formado por hembras o machos castrados con hembras.
Lo más emocionante es observarlas al anochecer. Entonces corren de un lado a otro, cavan túneles o desaparecen en una casita llena de material para el nido.
Importante:
Las ratones son muy sensibles al estrés. Les gusta el silencio, la regularidad y lo familiar. Por lo tanto, los niños deben aprender a observar a las ratones, pero sin provocar agitación.
Nutrición
A estos pequeños roedores les encanta la variedad: una mezcla de granos baja en cereales con semillas, hierbas y copos de verdura constituye la base. Además, puede haber diariamente algo de verde fresco o verdura cortada en trozos pequeños.
Los insectos u otros pequeños tentempiés proteicos son importantes, ya que proporcionan energía y fortalecen el sistema inmunitario. Siempre debe haber agua fresca disponible.
Comprobación de mitos:
- «Las ratones huelen mucho». → Solo si el recinto se limpia raramente. La limpieza es fundamental.
- «Son inquietas y nerviosas». → No si tienen suficiente espacio y posibilidades de retirarse.
Para padres: así se consigue una buena tenencia
- Tener siempre un grupo pequeño: las ratones son muy sociales.
- Diseñar el recinto de forma variada: tubos, casitas, corcho, material para roer.
- Limpieza semanal, pero mezclar un poco de lecho viejo: el olor familiar tranquiliza.
- Animar a los niños a observar, no a tocar.
- Planificar tiempo por las tardes: es cuando los animales están más activos.

Animalmente importante
Las ratones nos demuestran que la observación es un arte. Enseñan paciencia, atención y respeto por lo pequeño. Quien las observa con tranquilidad, experimenta cuánta vida, comunicación y confianza hay en estos pequeños bichitos.